domingo, febrero 10

Embolá!

A veces tan rápido, a veces tan lento.
El tiempo no deja cabida a desconcentraciones. El sutil segundo, el gran minutero, el horario abuelo. Te tropiezas con tu pensamiento anterior, con la vista de esa señora mirándote curiosamente, con los chicles negros pegados en la calle, con la mala intención del joven de gorro flaite que te sigue por atrás, con la luz potente de un trío de ampolletas, con un concierto de extraterrestres.

No imaginé que tanto duende se me pudiera aparecer para mezclar como djs mi situación, mi lugar, esos algos que mi cabeza intrusea. Me dirijo al sol que se aburre de nosotros, del juego de las nubes que lo tapan cuando ellas quieren y no encuentra nada mejor que lucir su naranjo tras las dunas con flora gigantes. Abro mis brazos, bailo.

Y es que gozar tanto de hacer nada, de esconderse...no hace bien.
Amigo sol, te espero mañana.

2 comentarios:

Manolete dijo...

No hacer nada entre tanto todo nunca es bueno, temer cantar y bailar vino en la calle es como negar que no somos mas que todo.



PD: te felicito por el BUTOH, siempre lo e admirado.

Anónimo dijo...

en volá, volao nombre.
en volá, volao nombre.

pa que más


salúd!