Recordatorio

(Acaba de cruzarse la idea del abuso de la autoreferencia...nótelo mientras niego que agrada)

Unos juguetes, un arpa, el sonido de una especie de pito para patos (que me derrite, confieso) y la voz apretada de esa tal Bianca Casady empezaron a traerme buenos recuerdos. Bueh...no sólo eso. Hoy estuve haciendo, sin querer, un recuento de cosas antiguas y virtuales que este y otros espacios no botan, y me he llevado la sorpresa de que establecí una relación atípica con las cosas propias. Que no las recuerde, que me sorprendan con su sola presencia, que me generen una reacción dependiendo de la trama, son parte de la gracia. Son verdaderas esporas de emociones.

Haciendo memoria (la poca que tengo) y pensandolo mejor, tuve la suerte de toparme en el camino con mucha gente que me ha amenizado el viaje. Los que me hablaron porque les tincó, los que me cambiaron la velocidad del paso, los que les desperté la atención, los que despertaron la mía, los que me siguieron, los que seguí, los que me tocaron las manos, los que perdí de vista, los que estaban ahí después de eso.Todas esas se convirtieron de repente en partecitas, muchas veces inconexas, que nutrieron este loco producto de involuntarios recuerdos placenteros.

Gracias!